El coordinador federal de IU afirma que “lanzamos esta ‘convocatoria social’ para construir un programa con los ciudadanos y con el pueblo como único protagonista”.
El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, lanzó hoy el compromiso que esta formación ha adquirido con los ciudadanos de cara a las próximas elecciones generales para elaborar “un ‘programa-contrato’ electoral creíble y que evite en la práctica el sufrimiento que soportan los ciudadanos”, ya que “con la protesta no es suficiente y se necesita cambiar las leyes en el Parlamento”, una vez celebrados los comicios.
El máximo responsable de IU asumió este reto durante su intervención en el acto de presentación de la ‘Convocatoria Social para una alternativa programática’, desarrollado en un Ateneo de Madrid abarrotado y a cuya convocatoria respondieron representantes de distintas asociaciones, grupos y colectivos del mundo sindical, de la economía, del ecologismo, de la Mujer, de la defensa de los Servicios Públicos, de la Universidad o de la Cultura.
“Es momento –dijo- de elecciones generales. Es la hora de la verdad y ya no hay excusas. Por eso lanzamos esta convocatoria social para construir un programa electoral con los ciudadanos, con el pueblo como único protagonista. Contamos para ello con las personas y colectivos que quieran cambiar la realidad frente al robo de la democracia, al robo de los derechos sociales y laborales, frente a la destrucción de lo público”.
Junto a Lara intervinieron distintos oradores que aportaron ideas para la elaboración de este programa electoral en base a los seis ejes o ‘revoluciones’ establecidas para avanzar en el trabajo de la ‘Convocatoria Social’: económica, democrática, ecológica, para la igualdad, por los Servicios Públicos y por la Cultura. También participaron, entre otros, los coordinadores del acto y responsables federales de Acción Política y Propuesta Programática de IU, José Luis Centella y Marga Ferré, respectivamente, y el portavoz parlamentario, Gaspar Llamazares.
Antes de exponer los ambiciosos objetivos de esta convocatoria, Lara expresó vehemente su “orgullo por militar y pertenecer a Izquierda Unida. Por poder ser uno más de los que elaboran este pensamiento colectivo y porque hoy en día nos podemos reconocer en cualquier parte del Estado y fuera de él por lo que decimos y defendemos”. Amplio este sentimiento de orgullo “a los hombres y mujeres que forman y han formado IU, los de ahora y otros como Marcelino Camacho o Dolores Ibarruri, a la que ahora la derecha le quita su nombre de un parque de una ciudad”.
El coordinador federal tuvo también palabras de reconocimiento para el movimiento de indignados, que hoy recupera protagonismo con la coincidencia en Madrid de distintas marchas reivindicativas a pie que partieron hace semanas de varios puntos del Estado. “Hoy llegan a Madrid miles de personas. Han tomado plazas y calles de toda la geografía. Son de los nuestros y de las nuestras, y lo digo sin liderazgos ni ninguna pretensión de estéril protagonismo”, explicó.
Detalló que “coincidimos con ellos en las críticas y en las ideas de lucha. Defendíamos ya esas ideas antes de que se formara este movimiento y, por ello, estuvimos, estamos y estaremos con ellos en las calles y en las plazas tratando de conseguir un cambio radical de esta sociedad”.
Pero Cayo Lara consideró que a este importante paso en la movilización le tienen que seguir otros no menos necesarios. Y puso un ejemplo para ilustrarlo: “Se han parado 15 ó 20 desahucios, pero sólo en el primer trimestre de este año ha habido cerca de 15.000”. Por ello exhortó a avanzar más ya que “la protesta no es suficiente. Hay que cambiar las leyes en el Parlamento. Hay que poner la ley al servicio de los desahuciados y no de los desahuciadores; hay que cambiar la leyes para que la Policía no tenga que defender las acciones de los que oprimen frente a los que son oprimidos”.
“La democracia –sentenció- se conquista cambiando la ley. Se lucha contra el fraude fiscal cambiando la ley; la Memoria Histórica se recupera con la ley; la energía nuclear se acaba cambiando la ley. No queremos más leyes dictadas desde esas mismas atalayas del poder que se niegan a condenar el franquismo, de los que votan a favor del ‘pensionazo’ como el pasado jueves en el Congreso o antes lo hicieron con el ‘tijeretazo’”.
“Queremos hacer un programa anticapitalista, de eso no tenemos dudas”, subrayó, al tiempo que exigió también una reforma de la Ley Electoral que impida que “los próximos comicios sean una estafa”.
El máximo responsable de IU trufó su intervención de referencias a temas de actualidad. Así, denunció la actuación de las “agencias de calificación, que actúan como cómplices de los especuladores, y con un Gobierno como el nuestro que se niega a que la Fiscalía actúe contra ellas en la denuncia que tenemos presentada en la Audiencia Nacional”.
Frente a las propuestas neoliberales y de recortes que se presentan como única alternativa para salir de la crisis, “y que comparten PSOE y PP”, Cayo Lara explicó con fuerza que “hay alternativa, es menos injusta que la de los recortes y mucho más útil para generar empleo y riqueza”.
También hizo referencia a la reestructuración del sector financiero y a la situación de las cajas de ahorros, mucho más tras la intervención de la Caja Mediterráneo (CAM) decretada ayer por el Banco de España y para la que se emplearán miles de millones de euros de dinero público. “Hoy se podía leer en algún medio que el Banco de España ‘nacionaliza’ la CAM. Sería precioso el titular si fuera cierto. Lo que van a hacer es socializar las pérdidas para que luego sea malvendida a los banqueros para que hagan más negocio”.
Recordó que la CAM es la tercera caja que se interviene. La primera fue Caja Castilla-La Mancha (CCM) y hubo una segunda actuación pública en Andalucía. “La CAM y CCM representan como nunca el modelo bipartidista de PSOE y PP, que ha fomentado la especulación financiera por encima de la inversión productiva. Estamos ante un nuevo presunto ‘robo’ impresionante por la mala actuación de unos gestores, pero nadie está en la cárcel y aquí es como si no hubiera pasado nada”.
Ante este nuevo ejemplo de las consecuencias de la crisis en el sector financiero, el mismo que contribuyó a crearla de forma decidida, Lara argumentó que “no es extraño que sigamos reivindicando y no vayamos a dejar de hacerlo una ¡Banca Pública, ya!”.
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